¿Por qué el Scrum correcto hace la diferencia?

Aprender Scrum de manera correcta es fundamental para maximizar los beneficios de esta herramienta ágil en la gestión de proyectos. Un entendimiento profundo de los principios y prácticas de Scrum, como los roles claramente definidos, los eventos y los artefactos, asegura que el equipo pueda colaborar de manera efectiva y adaptable. Además, una formación adecuada en Scrum promueve la transparencia, la inspección y la adaptación, principios clave que facilitan la entrega continua de valor y la mejora constante del proceso. Al invertir en una educación robusta y práctica en Scrum, los equipos pueden evitar malentendidos comunes, adoptar una mentalidad ágil genuina y, en última instancia, lograr una mayor eficiencia y satisfacción tanto en los resultados del proyecto como en la dinámica del equipo.

Si has empezado a leer este artículo, permíteme mencionar al menos tres supuestos por los que creo estás aquí:

• Estoy en búsqueda activa de nuevas oportunidades para desarrollar el potencial de mi talento profesional y Scrum es común denominador en las ofertas empresariales que he revisado.
• Necesito diferenciar mis postulaciones laborales con atributos que sumen a mis logros académicos y experiencia profesional para que las empresas con las que quisiera unir destinos consideren hacerme ya parte de su equipo.
• Estoy empezando o estoy en un camino de liderazgo y deseo enriquecer mis habilidades de forma que pueda ayudar a mi organización a responder mejor a las demandas y presiones de nuestra nueva realidad.

Algo de contexto para continuar.

¿Por qué hay empresas, hoy en día, obsesionadas con Scrum?

Porque aún no entendieron para qué es o para qué sirve Scrum. Se tenía que decir. Los niveles de gerencia o tomadores de decisiones en estas empresas piensan en Scrum como la “metodología” del momento, la clave revelada por la que su competencia los está borrando, la respuesta a sus plegarias para ser productivos, incluso como el proceso “mágico” para que sus “recursos” trabajen más rápido. Nada más equivocados.

Scrum es una herramienta como cualquier otra. Solo que ha demostrado ser la mejor de su clase.

Scrum, cuando es usado de forma consistente y disciplinada, hace visible, casi que, con efecto inmediato, los lastres que están frenando la agilidad en la organización. Luego, la herramienta importa, por supuesto, pero más el para qué.

A través de la praxis de excelencia de Scrum, se habilita la incorporación de la mentalidad ágil, un conjunto de valores y principios para el desarrollo de productos, servicios, soluciones y resultados de altísimo valor, a la vez que se desarrollan equipos híper-productivos.

Entonces, si se identifica lo que está evitando ser ágil a la organización y se contrasta con la mentalidad ágil correcta, es evidente que ahora se puede establecer qué tan lejos, qué tan cerca estamos de ser ágiles. Para ser ágiles hay que hacer agilidad. “Caminante no hay camino, se hace camino al andar”.

Luego la agilidad es una cuestión de “Ser a través del Hacer”. Lo más importante que hay que saber sobre las herramientas y procesos ágiles es que no existen. Sólo hay equipos ágiles.

Scrum es una herramienta para que las personas que hacen parte de equipos de trabajo aprenden a ser equipos ágiles.

En ese sentido toma especial cuidado aprender el Scrum correcto.

¿Cómo así? ¿Hay más de un Scrum? Scrum solo hay uno, desarrollado y soportado por el Dr. Jeff Sutherland y Ken Schwaber. Sin embargo, es fácil encontrarse con empresas que venden el Scrum de Google y Apple (en serio, así me lo vendieron una vez) o introducen elementos exóticos como “Sprint Inception”, “Sprint Concept”, “Sprint Zero” y la lista de “innovaciones” y distorsiones continúa.

Los programas de Scrum Alliance® son los programas que estás buscando. Aprenderás el verdadero Scrum. Tú podrás ser parte del entrenamiento definitivo en Scrum.

En dos días, aprenderás lo necesario para entrar al juego de la agilidad con suma potencia y de paso presentar las pruebas que te acreditarán como Certified ScrumMaster® y Certified Scrum Product Owner®, las cuales son las únicas acreditaciones en su clase, a nivel global. Ese atributo no es menor. No solo te diferenciará del resto por el respaldo de la entidad certificadora en Scrum más grande del mundo, sino por la calidad del Scrum que te enseñaremos.

Tendrás una experiencia inmersiva con Fabian Schwartz

• Único trainer avalado por las tres entidades más influyentes del mundo.
• Cocreador de Scrum en Hardware y revisor de la guía Scrum@Scale.
• Autor del libro "Scrum: Las Estrategias del Juego: Es Póker, no Ajedrez" es un referente.

Ahí está la clave.